Un día como no quiso la cosa en mi vida se cruzo algo muy especial, algo que pocas veces había sentido, algo que para mi no tenia significado por que no estaba aconstumbrada, algo que si en ese momento me preguntan que es, no hubiera sabido contestar. Era algo que me hacia sentir bien conmigo misma, pero que no sabia como llamarlo, cada día que pasaba sentía esos silencios, sentía esa semsación tan cerca de mi pero tan lejos a la vez, sentía como cada día una brisa recorría mi cuerpo llenándome de fuerzas para seguir para adelante. Eso se fue haciendo cada día mas especial cada momento sentía la necesidad de preocuparme, de saber, de no pasar indiferente ante algunas injusticias. De mi se ha dicho lo que nadie pudo escribir, me han juzgado sin apenas pararse a conocerme, aunque alguien pueda decir que si, pero aun así ese sentimiento que luego pude llamar amistad siguió dentro de mi. Esa sensación la vida la puso en mi camino, pero también ella se esta encargando de poquito a poquito enseñarme que nada es como se pinta, que se pueden decir muchas cosas sin sentirlas, que se puede estar con una persona cuando interesa y luego hacer como que no ha existido, que lo que un día se hace tan especial otro día tan solo es un sueño creado en la mente y que en realidad nada es lo que te hizo sentir fuerzas y luchar, pero todo tiene su lado bueno a pesar de ser malo, y es que en esta vida aunque sea de los fracasos y de las desilusiones, siempre se aprende.
